La periodontitis es una de las complicaciones más frecuentes de la diabetes, y a su vez, un paciente diabético tiene tres veces más posibilidades de padecer esta infección en las encías. Incluso, estudios recientes apuntan que una mala salud gingival podría anticipar el desarrollo posterior de diabetes. Está claro que la diabetes y la periodontitis entonces viven en una relación estrecha y peligrosa.
No obstante, gran parte de la población, y más preocupante, la mayoría de los que sufren de diabetes desconocen las nefastas implicaciones que tiene la enfermedad periodontal en la aparición y desarrollo de causas que terminarán despertando a la diabetes, como puede ser la retinopatía, neuropatía, enfermedades coronarias o, incluso, accidentes cerebrovasculares. Para evitar todo esto, el paciente está instruido en una serie de hábitos de vida saludables. Sin embargo, los profesionales insisten en que “los consejos de higiene bucodental no son tenidos en cuenta como hábitos saludables indispensables en los diabéticos”.
El gran problema es que el diabético tiene una mala tolerancia a las infecciones, pues provocan una resistencia en el organismo a la acción de la insulina, lo que garantiza alteraciones de la glucemia, provocando situaciones extremas como el coma diabético. Es muy importante por ello evitar las infecciones de origen bucodental. No solo la infección de encías, sino que la pérdida de dientes, por ejemplo, puede ser también una causa grave de los problemas diabéticos.
En definitiva, está demostrado que un buen tratamiento y control de la enfermedad periodontal en el diabético facilita el control de su glucemia, disminuyendo así el riesgo de complicaciones derivadas.
FUENTE: www.cuidatusencias.es